This Christmas full yourself

Llénate de ti, menos de lo que está de más y más de lo que en realidad importa.

Les escribo en este domingo nublado con muchos sentimientos encontrados, agradecida de lo que es hoy pero sobre todo de lo que tuvo que ser ayer para que sea lo que es hoy. Ahorita que estoy de vacaciones he tenido mucho tiempo de pensar y ser consciente de todo lo que he vivido conectando cables este año,en el que tuve mi despertar espiritual.  Últimamente he conectado y coincidido con personas que hablan sobre eso y las estoy atrayendo DEMASIADO jajaja no creo que sea casualidad que hablen el mismo idioma, porque me generan más energía, más inspiración y nuevas forma de ver la vida. Amo compartirme con personas que me generen este efecto, de reír, e inspirarme y que traen a la mesa diferentes perspectivas. Y es que mi manera de guiarme en esta vida es seguir a todo eso, eso que me llena el corazón, que me inspira y me da pasión, porque sabes que es un ganar ganar, pues al inspirarte, tú das tu cien y el hacer las cosas bien siempre recompensa.

Hace un año yo estaba pasando por una de las peores rachas de mi vida, hace un año mi mundo estaba completamente al revés. Todo se sentía tan forzado, yo me sentía forzada, mis relaciones sentimentales y de trabajo lo eran. Creo que forzar lo que sabes que no debe ser, te priva de todo lo que sí puede ser y es para ti, todo lo que está escrito y destinado en tu plan divino; porque por dentro lo sabes, la intuición siempre lo dice pero a veces ignorarla es más sencillo que encarar nuestra verdad, es de valientes aceptar lo que no es aunque duela, porque solo así, cómo es podemos hacernos responsables y en ese momento de mi vida no me sentía capaz de enfrentar mi verdad, me moría de miedo de lo que traería consigo.

Hoy, justo después de un año volteo atrás y me doy cuenta de que mi vida ha cambiado por completo dando un giro de 180° grados. Todo es igual pero yo no. Lo demás no ha cambiado pero si ha cambiado la manera en la que abordo las cosas, y eso me está trayendo diferentes resultados. Muchas veces esperamos tener un pastel diferente pero seguimos cocinando con la misma receta.

Me da risa pero siempre había sido mi sueño pasar navidad en pareja, el típico sueño que tienen mis amigas y amigos de pasar año nuevo con el amor de su vida, por eso varios optamos por meternos debajo de la mesa o el calzón rojo para atraer el amor. Hace un año aguanté tantas cosas forzando las cosas con alguien para no pasar esas fechas “sola”, lo cierto es que me sentía tan sola aun estando rodeada de muchas personas. Me sentía tan vacía de llenarme de las cosas incorrectas que quería que fueran correctas, forzando relaciones sentimentales, lugares y acciones. Pero es que al amor no hay que perseguirlo, o forzarlo. El amor simplemente es. El amor se da de la manera mas genuina. El amor no son amarres, no es condicional o interesado; mucho menos es miedo, miedo a la soledad, a los juicios. El amor se vive sin limitaciones, sin expectativas y en libertad.

He descubierto que lo que buscaba de lo demás siempre estuvo en mi. De lo que necesitaba tener de los demás me lo necesitaba dar primero a mi misma. Ese vacío lo estaba tratando de llenar saturándolo de lo incorrecto. Entonces, lo empecé a vaciar para llenarlo de menos de lo correcto y jamás me había sentido tan llena, satisfecha. Recuerdo que forzarla, me dejaba un vacío que se sentía como resaca, realmente lo tenía todo: la pareja, el trabajo, las amistades pero siempre regresaba con el corazón apachurrado, como si me hubieran asaltado el corazón y dejado sin pertenencias. Daba pero no me llenaba. Porque apostaba a las cosas incorrectas, y en mi ceguedad de querer tener todo tal y como yo quería y veía en mi cabeza, no me daba cuenta que esos vasos estaban rotos y por ende nunca se llenaban.

Nadie me llenó mejor que tenerme a mi misma

Hoy irónicamente he decidido que menos es más, menos pero me siento más llena que cuando trataba de llenar ese vacío, vacío de mi. Tengo poco de lo correcto y me siento tan saciada, que el corazón se siente agradecido. Tanto que me debía y no me daba que hoy me he estado dando.

Que si un día llega una persona y me vuelva a enamorar, estoy segura que estaré dando desde la un lugar lleno y no desde la carencia. Compartiré ese ser completo que soy y no buscaré que completen partes de mi que yo me necesito dar. Porque he aprendido que nadie me va a dar lo que yo no me doy, que todo viene desde adentro y se refleja afuera, que para amar bien a otra persona primero debo amarme bien a mi misma.

Así que esta navidad les deseo eso; les deseo que se compartan con personas que se sientan casa, que siempre se rodeen de personas que les dejen el corazón contento cuando regresen a casa, que tengan ese efecto generador de energía y vida, que no sientan el vacío navideño. Que al ver fotos en parejas o no tener a esa pareja que siempre han soñado no se sientan con la necesidad de escoger lo primero que ven, o estar con la primera persona que se les cruce; que escojan con intención y consciencia a los lugares donde se metan y compartan, porque si nos metemos en relaciones donde entramos por carencia y no por compartir, siempre termina ese efecto de vacío y casi siempre alguien termina dando de más creando, creando heridas de por medio.

Les deseo que se llenen de ustedes, que no tengan la necesidad de forzarla con alguien, aguantando solo por estar, o por tener. Que se rodeen de personas que las hacen sentir bien, que las hacen brillar y juntas crean sinergia, simplemente porque les encanta compartir su vida con ellos, no por necesidad de llenar vacíos o estar con alguien, no por apego… Sino de la forma más genuina y pura del amor, dar y amar sin querer o esperar algo a cambio, con dicha y a manos llenas, sin dudas.

Suena cursi pero es verdad.

Este año nuevo tengo tengo varias intenciones, ser mas asertiva en como me comunico, en que mis relaciones sean mas nutritivas, más llenas de vida, energía. De seguir sembrando en eso que quiero cosechar, porque son cosechas que nutren, nutren el alma, la vida. Y al mismo tiempo, alejarme y evitar esos lugares en los que no suman o encajo, robándome todo lo que soy porque no puedo ser yo misma en esos espacios y qué peor que la primer persona que te rechace seas tú mismo. Tener la dicha de encontrar y entrar a esos espacios donde mi ser sea bienvenido, porque lo que es para ti se siente fácil, suave, sin fricción.

Este fin de año reflexiona todo lo que te ha servido, las cosas que quieras intencionar, tu manera de vivir. Ajusta el telescopio de la perspectiva con la que veas tu vida y vas a ver que la puedes ver mejor, con mayor claridad, así como cuando queremos ver la luna, vete a ti mismo. Tú eres tu centro de gravedad. Tienes todo si te tienes a ti mismo. Da con intención y vas a ver que se regresa el doble, que tu satisfacción sea en el dar lo mejor de ti, y el resultado siempre termina siendo la cereza del pastel.

Disfruta estas vacaciones de vísperas de navidad con los que te dejan el alma llena y el corazón contento, te juro que la perspectiva cambia.

Pero sobre todo llénate de ti, menos de lo que está de mas y mas de lo que en realidad importa.

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-Your fellow writer

DMSO

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